TOMADO DEL ESTUDIO “CULTURA JUVENIL GLOBAL” REALIZADO POR ONEHOPE
Como líderes o pastores de una iglesia debemos tener muy claro que la salud mental está ligada al cuerpo como al espíritu. Tenemos un ejemplo bíblico en Elías, cuya salud mental sufrió durante su conflicto con la reina Jezabel. Después de que el profeta descansó y se recargó físicamente, Dios le dio ánimo, un nuevo propósito y un asistente para seguir adelante (1 R. 19:4-18).
Es claro que la salud mental es un tema que le interesa a Dios. Él está siempre dispuesto a ser el mayor soporte para que en nuestras vidasnla salud mental sea algo que se mantenga en el correcto balance. Dios espera de nosotros que podamos entender las necesidades de nuestros adolescentes y lo que está pasando por sus mentes, para servirles de una manera más efectiva y oportuna en medio de los tiempos difíciles y turbulentos que están viviendo.
El último estudio de la CULTURA JUVENIL GLOBAL realizado por OneHope descubre resultados inquietantes acerca de la SALUD MENTAL de los jóvenes y adolescentes y estaremos compartiendo algunos de estos resultados con ustedes. Cabe resaltar que este estudio fue realizado en 20 países, a más de 8.000 jóvenes y adolescentes entre los 13 y 19 años.
La fe y la salud mental:
El estudio arrojó como resultado que una de las mayores influencias positivas en la salud mental de una persona joven fue su compromiso con la fe. Es decir, que los jóvenes y adolescentes que se fundamentan a las creencias del cristianismo y viven y practican las disciplinas espirituales como leer sus Biblias y orar, luchan menos con su salud mental en todas las áreas. Lamentablemente, esta misma tendencia no se observó en nuestros adolescentes de América Latina y España. La cantidad de adolescentes cristianos comprometidos en estos países es muy pequeña y reconocieron que luchan con problemas similares a los de otros adolescentes. En algunos casos, incluso se vio que les iba un poco peor, por ejemplo, que tenían más ansiedad.
La salud mental y el respeto por su vida:
Durante el estudio de la Cultura Juvenil Global también se les pidió a los adolescentes que informaran si en los últimos tres meses habían experimentado pensamientos suicidas o habían intentado suicidarse. De los 20 países de nuestro estudio global, México, Argentina y Colombia se ubicaron entre los 4 primeros en intentos de suicidio. Lo que significa que en América Latina tenemos los índices más altos a nivel mundial en intentos de suicidio de adolescentes. Esto es algo que nos debe llevar a reflexionar y a accionar coherentemente a nuestra responsabilidad frente a Dios y frente a esta población tan importante para el presente y futuro de nuestras iglesias, grupos o congregaciones.
Riesgo de Suicidio
El estudio dejó claro que los intentos de suicidio tenían cierta tendencia según la edad, y los adolescentes más jóvenes tenían más posibilidades que los adolescentes mayores. Un dato muy interesante es que las chicas, aunque son el promedio más alto en pensamientos suicidas con un (38% frente a un 24% en los chicos) tienden más que los chicos a informar sobre pensamientos e intentos suicidas. Por último, los adolescentes que diariamente pasan más tiempo en línea también se consideran más vulnerables que aquellos que pasan menos tiempo en internet.
El desafío frente a esta realidad acercarnos a nuestros adolescentes, conocerlos, escucharlos y conectar con ellos. Es imprescindible que tengamos acciones reales frente a esta confrontante realidad.