En nuestro artículo anterior destacamos la importancia que tiene, para todo líder de adolescentes y jóvenes cristianos, conocer un poco sobre las capacidades cognitivas del ser humano y cómo éstas afectan el desempeño de los grupos que atiende en la congregación. Allí recordamos que estas capacidades son las habilidades que nos permiten el procesamiento de información, la resolución de problemas, la percepción, el lenguaje, y la memoria entre otras. 

También hablamos de los cambios que experimentan los jóvenes y adolescentes en esta etapa, y que pueden ser aprovechados por el líder cristiano para dejar un fundamento firme de las enseñanzas del Señor Jesús en ellos. Y así mismo, contribuir al mejor desarrollo de las capacidades cognitivas que está descubriendo en esos muchachos.

Los adolescentes en etapa media, entre los 15 a 17 años muestran:

• Un crecimiento continuo de la capacidad para el pensamiento abstracto. El líder de jóvenes puede proponerse guiar a estos adolescentes a pensar críticamente acerca de su fe y el mundo que los rodea. Conducirlos a la contextualización de la historia de jóvenes en la palabra de Dios, y/o presentar testimonios de como Jesucristo está transformando, por medio de su Espíritu Santo, la vida de muchos jóvenes en la actualidad, puede ser usado para retarlos a fundamentar sus reacciones en lo que Dios Padre le dice en su Palabra a sus hijos. 
• Mayor capacidad para establecer metas. Es una oportunidad para animarles a generar proyectos alcanzables a corto o mediano plazo, en especial los que traigan beneficio a su entorno y así aprovechar su creciente Interés en el razonamiento moral, y el significado de la vida. El líder de estos jóvenes les ayuda a descubrir y canalizar las destrezas de liderazgos y deseos de servir a otros. 

En aquellos jóvenes en la etapa de adolescencia tardía 18 a 21 años, observamos

• Capacidad de pensar a través de ideas, es una etapa para plantear retos de creatividad y llamarlos a expresar sus convicciones cristianas en las diferentes manifestaciones artísticas. También, el líder cristiano puede promover proyectos de servicio a más largo plazo entre estos jóvenes y aprovechar la Capacidad de demorar la gratificación que ahora ellos tienen, son el grupo mejor aprovechable como voluntarios en la congregación y afirmarles aún más en su identidad en Cristo.
• En los jóvenes de estas edades continúan observándose un Aumento en la preocupación sobre el futuro, sin embargo, el líder de estos jóvenes tiene la oportunidad de presentar enseñanzas que les ayuden a tomar decisiones más definitivas con relación a su futuro; sus talentos, habilidades, dones que les ayudaran a dirigir sus pasos a los oficios, carreras, profesiones y ministerios que le permitan cumplir el propósito de Dios Padre para sus vidas.
• Los jóvenes en la adolescencia tardía siguen Interesándose en el razonamiento moral, y la preocupación por los demás; como sus relaciones interpersonales mantienen un lugar muy importante en su vida, es el momento de desarrollar relaciones más serias y perdurables; por lo tanto, el líder de estos jóvenes tiene la oportunidad de plantear temas y situaciones que le permita a este grupo cuestionar las decisiones que están tomando y cómo evaluarlas a la luz de la Palabra de Dios. 

Todo maestro de la ley que ha aprendido sobre el reino de Dios, es como el dueño de una casa. De lo que tiene guardado saca cosas nuevas y cosas antiguas” 

(Mateo 13:52 PDT)