TOMADO DEL ESTUDIO “CULTURA JUVENIL GLOBAL” REALIZADO POR ONEHOPE
Me había hundido por completo. El mar me cubría todo, y las algas se enredaban en mi cabeza. »Creí que ya nunca saldría del fondo del mar. Pero tú, Dios mío, me salvaste la vida. »Cuando ya estaba sin fuerzas, me acordé de ti, y oré. Mi oración llegó hasta tu santuario. Jonás 2:5-7
En entregas anteriores de este valioso recurso concluimos que como pastores y líderes deberíamos conocer más a fondo a nuestros jóvenes y adolescentes e ir más allá de verlos sentados recibiendo nuestros sermones o involucrados en nuestros lugares de reunión. Dios está esperando de nosotros que podamos entender sus necesidades y lo que está pasando por sus mentes, para servirles de una manera más efectiva y oportuna en medio de los tiempos difíciles y tan turbulentos que están viviendo.
En nuestro estudio de la CULTURA JUVENIL GLOBAL descubrimos resultados sorprendentes y a la vez preocupantes acerca de la SALUD MENTAL de los jóvenes. Compartiremos algunos de estos resultados con ustedes para que cada uno pueda reflexionar y hacer una revisión acerca de sus estrategias de trabajo frente a esta importante población.
Y es que los adolescentes de hoy están creciendo en un mundo cada vez más diverso y complejo. Agreguemos a eso el hecho de que la adolescencia ya es una época llena de incertidumbres y dificultades, y es allí donde encontramos el origen del por qué los jóvenes informan que están luchando con dificultades en sus vidas.
Cabe aclarar que este estudio fue realizado en 20 países, a más de 8.000 jóvenes y adolescentes entre los 13 y 19 años.
Sobre este asunto de su salud mental descubrimos lo siguiente:
Una gran cantidad de adolescentes y jóvenes están luchando con problemas de salud mental, específicamente hablan de soledad 59% y mucha ansiedad 49%. Esto es algo verdaderamente preocupante y que muy probablemente no está en nuestro radar de asuntos por atender dentro de nuestros jóvenes. Igualmente quedaron en evidencia las altas tazas de depresión que experimentan llegando a un preocupante 41%.
Sobre pensamientos suicidas:
Este es un asunto ciertamente muy serio; el estudio descubrió qué el 31% de nuestros jóvenes y adolescentes tuvo pensamientos suicidas en los últimos tres meses, es decir que uno de cada nueve encuestados intentó quitarse la vida. Lo que significa que el porcentaje es verdaderamente preocupante y es algo que nos podría dar información muy valiosa para atender adecuadamente a esta población dentro de nuestras iglesias y congregaciones.
En México por ejemplo estos niveles de salud mental con intenciones suicidas es muy alto por lo que este país forma parte de los cinco primeros con tasas más altas de ideas e intentos suicidas entre los 20 países de nuestro estudio.
Sobre su sexualidad:
El estudio de la cultura juvenil global de OneHope arrojó igualmente resultados dignos de una observación detallada acerca de la sexualidad de nuestros jóvenes y adolescentes. Un dato alarmante es que la mitad de los jóvenes encuestados han visto pornografía recientemente y que uno de cada tres adolescentes solteros ha estado sexualmente activo en los últimos tres meses.
Quiénes son los más vulnerables:
En términos de género los resultados arrojaron que las niñas luchan mucho más que los niños con su salud mental en todas las áreas.
La importancia de la fe:
En nuestro estudio, una de las mayores influencias positivas en la salud mental de una persona joven fue su compromiso con la fe. Los adolescentes que se aferran a las creencias fundamentales del cristianismo y practican las disciplinas espirituales, luchan menos con su salud mental en todas las áreas. Sin embargo, la cantidad de adolescentes cristianos comprometidos en nuestros países es cada vez meas pequeña y reconocieron que luchan con problemas similares a los de otros adolescentes.